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El uso de las pantallas interactivas como herramienta dinámica en el aprendizaje

Las tecnologías de la información y la comunicación son un componente fundamental de la escuela actual. El uso de estas como el Smart Board en Monterrey es esencial, al igual que su adecuación. Además, la inversión en infraestructuras relacionada con las TIC y la puesta en marcha de cada una de estas es un compromiso que los maestros deben tener para que la comunidad educativa evolucione de una manera considerable de acuerdo con las transformaciones de esta era digitalizada.

La tecnología nos ha transformado poco a poco como individuos y sociedad, porque ha cambiado todo aquello con lo que estábamos familiarizados. La capacidad de adaptabilidad que tenga el ser humano dictará el éxito como personas y profesionales. La llegada de herramientas interactivas como la pantalla inteligente, cambia el paradigma de que el aula expositiva se basa en darle todo el protagonismo al maestro y es el centro y el poseedor del conocimiento absoluto para transmitirlo.

La inmensidad de recursos proporcionados por este artefacto tecnológico sugiere que los maestros cambien de actitud y escuchen lo que la sociedad, sus alumnos y ellos mismos tiene que decir y aportar para una transformación educativa innovadora, dinámica e integral. Esto teniendo en cuenta que los procesos educativos de hoy buscan ayudar a impulsar el potencial de cada individuo, para que adquiera y desarrolle las habilidades pertinentes para un razonamiento crítico para el actuar en la sociedad.

Para ello, también es necesario ayudarles en la construcción de las relaciones sociales, desde la adquisición de valores básicos para el ejercicio de la ciudadanía, que apuntan al bien común. La educación es el elemento clave para que las personas y las instituciones puedan afrontar lo nuevo, crear y, así, garantizar su espacio de libertad y autonomía. Para esto, es necesario crear los espacios adecuados que les permitan a los estudiantes acompañar los cambios tecnológicos e innovar.

Desde esa perspectiva, le corresponde tanto a maestros como escuelas innovar en sus metodologías de enseñanza, incluyendo en sus recursos tecnológicos y prácticos, aquellos que sean más interactivos o dinámicos y contribuyan al aprendizaje trascendental de los estudiantes. Partiendo de este concepto de interacción, el propósito de este artículo es sugerirles el uso del Smart Board en Monterrey como uno de esos recursos efectivos que mejoran el proceso de enseñanza-aprendizaje.

Esta herramienta se distingue por ser una pantalla táctil sobre la que se proyectan, haciendo uso de diferentes aplicaciones para incentivar el dinamismo entre todos. Además, existen diversos softwares de gestión, específicos para el personal interactivo, que proporcionan más recursos para la preparación de clases, posibilitando la inclusión del lenguaje audiovisual en las prácticas pedagógicas.

El beneficio de la pizarra digital sobre otras tecnologías, como la radio, televisión o computadora, es que incorpora las funciones de estos recursos y, esto acerca el lenguaje audiovisual a los procesos desarrollados en el aula, principalmente en la interactividad que se dio a través de las prácticas pedagógicas y los procesos comunicativos que docentes y alumnos establecen utilizando esta herramienta efectiva.

La escuela en el contexto actual

La escuela es reconocida por la mayoría de las culturas como el lugar responsable para la sistematización de los procesos educativos. Es un espacio privilegiado para la socialización, el intercambio de información y construcción de conocimiento. La estructura curricular consta de contenidos y conocimientos científicos, pero también de valores importantes, que son construidos en su interior por los sujetos que lo componen, para el ejercicio de la ciudadanía.

Los desarrollos tecnológicos han estado propiciando la innovación y el dinamismo de la educación en los espacios tradicionales y no convencionales como los ámbitos presenciales diferenciadores, virtuales o híbridos. La necesidad de romper los paradigmas tradicionales de una enseñanza clásica ha propiciado que los estudiantes estén más sumergidos en su proceso de aprendizaje, autonomía y en la construcción de su propio conocimiento.

La escuela ya no puede ser concebida como el espacio de solo cuatro paredes y un entorno en donde el maestro es el que posee el único conocimiento y los alumnos precisan de ser “alumbrados”. Ahora, los centros educativos y espacios destinados para esto son vistos como los lugares para que el aprendizaje sea una construcción mutua que lleve a los estudiantes a apasionarse por el saber, conocer y hacer.

Por lo tanto, es importante reflexionar sobre los recursos pedagógicos que pueden ser empleados para optimizar las clases, haciéndolas más significativas para los estudiantes. El Smart Board en Monterrey hace parte del concepto de interacción, que es considerado como parte del proceso de construcción del conocimiento mediante el análisis y la exploración de los objetos del aprendizaje, así como de los intercambios que el individuo realiza con el entorno.

La concepción constructivista se adapta de manera adecuada al contexto actual de educación, ya que los estudiantes reciben de manera constante el conocimiento de diversas fuentes, como los medios de comunicación y, a partir de ellos, reelaboran sus estructuras cognitivas. Por tanto, la escuela precisa de entender y aceptar la influencia de las tecnologías de la información y comunicación para aprovecharlas en beneficio del proceso enseñanza-aprendizaje.

Por ende, se puede añadir que el docente debe reconocer que el procedimiento educativo es un espacio abierto, constituido para el conocimiento que surge del entrelazamiento de acciones de exploración, investigación y construcción colectiva o individual, que tienen lugar en el universo de las tecnologías digitales. Es de suma importancia que los maestros tengan la disposición constante de evolucionar y aprender para incorporar herramientas que salgan del currículum estudiantil convencional.

Indiscutiblemente, podría decirse que la tiza, pizarra, marcadores, tablero, el libro y el cuaderno juegan un papel muy importante en el proceso de enseñanza-aprendizaje. Pero la inclusión e inserción de nuevos recursos tecnológicos, como el proyector interactivo, puede ayudar al desarrollo de actividades diferenciadoras y motivadoras, brindando al maestro la oportunidad de actualizarse según las formas de aprender de las nuevas generaciones.

Del lenguaje audiovisual a los propósitos de las pantallas interactivas

El uso masificado de los equipos electrónicos como la radio, televisión, computadora, y DVD, posibilitó la integración de estas y otras tecnologías innovadoras en el entorno escolar para ampliar la cantidad de recursos pedagógicos que usan los maestros. La utilización de estos recursos permite la creación de clases innovadoras y dinámicas, para la presentación de imágenes, sonidos, videos, fotos que enriquecen el proceso de enseñanza-aprendizaje.

Además, es necesario considerar que, actualmente, el tiempo en el que niños y jóvenes se dedican al uso de medios como internet, televisión y videojuegos es bastante alto. Esto evidencia que las escuelas y otras instituciones educativas deben incorporar tecnologías que no entretienen a los estudiantes, sino que los lleven a aprender de manera significativa y trascendental de una forma dinámica y que los lleve a ser ciudadanos que aporten creatividad e innovación a la sociedad.

Así, el contacto con el lenguaje audiovisual, que se compone de una serie de conjugaciones de expresiones orales, sonoras y visuales que se hicieron extremadamente presentes en las experiencias vividas por los estudiantes, fomentando la necesidad de tener una integración de este lenguaje con la cultura oral y escrita, que es la más utilizada por la escuela. Las tecnologías han sido integradoras de esas necesidades presentes en el ámbito educativo.

Las técnicas audiovisuales permiten ahorrar tiempo e impulsar el talento, ya que a través de películas, programas de televisión y documentales es posible contextualizar y ejemplificar, con imágenes y audio, ciertos conceptos y contenidos, obteniendo a menudo resultados más efectivos, que si se les enseñara usando la pizarra y el libro. Además, es bien conocido por la pedagogía que los estilos de aprendizaje se dan principalmente por los aspectos visuales, auditivos y kinestésicos.

En este sentido, el Smart Board en Monterrey aparece como un dispositivo que permite integrar el lenguaje audiovisual y kinestésico en la práctica educativa de los profesores. Por lo tanto, es la herramienta que posibilita las acciones para hacer, comprender y comunicar de manera eficiente. Este maravilloso recurso puede complementar y potenciar los procesos educativos en el aula, innovando las formas de construcción del conocimiento.

En esta perspectiva, la pizarra digital es mediadora entre las actividades propuestas por el maestro, la comprensión y asimilación de los mismos estudiantes, ayudando en el desarrollo de prácticas innovadoras en el proceso enseñanza-aprendizaje. Además, por medio de esta herramienta, ustedes como maestros podrán crear conexiones significativas con sus estudiantes en entornos de aprendizaje mixtos.

Con este instrumento, podrán tener una combinación perfecta que ha sido diseñada para que los contenidos, la tecnología y pedagogía estén en un mismo dispositivo. Para más información sobre esta herramienta tecnológica innovadora, podrán escribirnos al correo electrónico contacto@computerland.com.mx o llamarnos al (33) 3915 6666 porque en Computerland ustedes encontrarán lo que tanto han estado buscando: tecnología para la educación.

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