¿Qué es la robótica educativa?

La robótica educativa es una forma de aprender a través de la utilización de diferentes dispositivos y recursos tecnológicos. Un nuevo recurso pedagógico que no tiene límites. Los alumnos, gracias a las posibilidades que ofrecen los cursos de robótica consiguen desarrollar diferentes habilidades y conocimientos basados en las ciencias, tecnología ingeniería, arte y matemáticas. Estas materias no son más que la tradución al español de las siglas STEAM (Science, Technology, Engineering, Art and Mathematics), muy utilizada alrededor del mundo para englobar todas las actividades que integran éstas disciplinas.

Así, tal y como nosotros lo contamos, puede resultar aburrido, pero afortunadamente la robótica educativa es todo lo contrario: juegos y diversión son la base del aprendizaje para los alumnos.

Sin embargo, estamos acostumbrados a escuchar y leer artículos sobre las ventajas en la enseñanza educativa, así como las maravillas de la educación a través de la tecnología. Este tipo de actividades cumplen una serie de objetivos que son independientes del nivel educativo al que nos dirijamos, desde Educación Temprana hasta Secundaria. Lo que cambia es la forma de impartir los contenidos y conceptos que pueden aprender en los mismos.

Son muchas las instituciones educativas que han incorporado la robótica educativa en sus actividades extraescolares, pero todavía queda un largo camino por recorrer para que todos los alumnos puedan disfrutarla.

5 claves fundamentales sobre la enseñanza de robótica educativa.

1. Materias STEAM y nuevas habilidades básicas

La robótica educativa incorpora el aprendizaje de nuevas materias aparte de las de STEAM (Ciencias, Tecnología, Ingeniería, Arte y Matemáticas) en todos los niveles de educación. Los alumnos comienzan a aprender también el funcionamiento del entorno y su lenguaje.

2. Tener en cuenta el nivel de desarrollo de los alumnos.

Es importante tener en cuenta las etapas cognitivas y las habilidades que poseen los alumnos. Tanto en Primaria como en Secundaria, los alumnos saben leer o tienen claro determinados conceptos como puede ser, por ejemplo, reconocer la derecha de la izquierda, sin embargo, en Educación Temprana no. Aunque suene obvio, es muy importante que las herramientas utilizadas en las clase de robótica estén adaptadas para cada edad, ya que existen algunas que por su facilidad de uso podrían ser perfectamente utilizadas, pero requiere de habilidades como lectura o las matemáticas a un nivel superior para poderlas utilizar de manera exitosa.

3. La robótica educativa aumenta su motivación y creatividad.

Los alumnos basan gran parte de su aprendizaje en ver los resultados de sus acciones de forma inconsciente, así como en la repetición, por ello la robótica educativa permite que éstos vean un resultado inmediato. Por ejemplo con acciones que le ordenan a un robot, un estímulo muy rápido que fomenta su motivación y permite que no se aburra. Además, gracias a la naturaleza curiosa de los alumnos, desarrollan su creatividad de forma que en el momento en el que adquieren un concepto básico tienden a explorar más alternativas e imponerse a sí mismos nuevos objetivos y retos.

4. El fin es aprender, la robótica y la tecnología educativa solo son medios.

Como hemos comentado anteriormente, es muy interesante enseñarles a los alumnos programar, pero hemos de tener en cuenta que durante este proceso se tiene que incorporar el aprendizaje de otros conceptos básicos como comenzar a diferenciar direcciones (arriba, abajo, derecha o izquierda) o términos matemáticos básico. Además, gracias a esta motivación consiguen potenciar su concentración.

5. Los alumnos deben divertirse.

La ventaja de la robótica educativa es que con nuestros robots y sin herramientas, permite que los alumnos lo perciban como una actividad lúdica y divertida. Es por ello que hay que prestar mucha atención a cada uno de los alumnos para poder detectar todas sus dificultades de aprendizaje y ayudarles a mejorar para desarrollar de manera óptima todas las virtudes y habilidades que poseen.

Habilidades técnicas y destrezas que aprenden en robótica.

Si bien es muy importante que los alumnos aprendan a desarrollar talentos y conocimientos basados en la teoría, también debemos tener en cuenta que en la educación debemos introducirles el comportamiento dentro de una sociedad. Como bien sabemos, desde las edades tempranas, los alumnos empiezan a desarrollar diferentes comportamientos en relación a las experiencias que ellos tienen y en la forma en que los docentes les ayudan a gestionarlos. Los alumnos se frustran, lloran, ríen, aprenden e incluso se esfuerzan o no en función de cómo se les enseña, tanto en la casa con en la escuela o colegio, a gestionar esos sentimientos y a cómo deben afrontarlos. Desde las clases de robótica se requiere introducir y ayudar a preparar a los alumnos a reconocer estos sentimientos y a gestionar sus comportamientos, estimulando y reforzando las actitudes positivas y ayudándoles a tolerar y modificas las negativas, lo que le será muy útil en su futuro desarrollo persona y por supuesto en el futuro entorno laboral.

1. Lógica.

Dado que los alumnos deben resolver un problema, el desarrollo del pensamiento lógico es primordial. Deben aplicar diferentes razonamientos para ve la lógica tanto de la solución que plantean como el razonamiento de los pasos que deben seguir para poder alcanza una solución. Se desarrolla la habilidad para deducir el comportamiento que debería seguir el robot si hace lo que ellos han planteado para cumplir el objetivo.

2. Tecnología.

Además de aprender utilizando tecnología, los alumnos comienzan a comprender la importancia que tienen estos dispositivios para el funcionamiento del mundo en general. Primero lo aplicarán a pequeña escala, mientras lo ven como un juego, después lo comienzan a ver, gracias a la tecnología, con un enfoque más específico, en donde ven que no hay límites para todo lo que quieran y puedan construir.

3. Programación.

Es la base de robótica y de otras materias. Los estudiantes aprenden a programa los dispositivo para que realicen determinadas funciones. Además utilizan códigos de programación adaptados para su edad pero cuyo comandos son válidos para otros tipos de programación avanzada. Asientan y desarrollan los conceptos de programación, muy útiles para su futuro.

4. Matemáticas.

Tanto en la programación con los robots, como en el desarrollo de videojuegos, los alumnos aprenden diferentes aspectos de las matemáticas. Entienden el funcionamiento de conceptos abstractos como son los números negativos o trabajan con grados, e incluso pueden desarrollarse herramientas específicas con diversos programas para el aprendizaje de matemáticas con estos sistemas de programación.

5. Informática.

Como complemento a todas las habilidades anteriores,  los alumnos aprenden informática. El funcionamiento de los propios programas, el uso de una computadora o de dispositivos como tabletas y teléfonos inteligentes. Con ello van aprendiendo y consiguen familiarizarse con la interfaz, de forma que en el futuro son capaces de utilizar diferentes interfaces o programas basándose en su intuición derivada de su experiencia.

6. Creatividad

La robótica permite que los alumnos construyan los robots desde su imaginación, deben pensar en la manera de construirlos y cómo hacerlos funcionar. Desde un pensamiento creativo en la libertad de construcción hasta la creatividad que ellos mismos desarrollan al pensar en diferentes caminos para resolver un problema planteado por los docentes. Esta creatividad, unida a un pensamiento lógico permite que el alumno vea más allá de un solo camino para llegar a su objetivo.

7. Trabajo en equipo.

La importancia de los valores en el trabajo en equipo es fundamental. Los comportamientos que los alumnos tienen en los grupos de trabajo pasan primero por asumir un rol, tomar decisones, orgnizarse, repartirse el trabajo, respetarse y adquirir una visión desde diferentes puntos de vista de un mismo problema. Este tipo de comportamientos les serán muy útiles para su futuro en el entorno laboral dado que los puestos de trabajo y las metodologías aplicadas en las empresas innovadoras fomentan el trabajo por equipos y proyectos.

8. Habilidades sociales y autoconfianza.

Lo más importante de estos comportamientos, es que los alumnos consiguen relacionarse entre si. Esta afirmación, que a priori puede parecer lógica, no lo es tanto cuanto los alumnos tienen diversos problemas de timidez causada, en mayor medida por sus inseguridades. El hecho de que se trabaje en grupo y cada uno tenga que asumir un rol, les pauta al resto del grupo que cada miembro del equipo es necesario para llegar a la resolución del problema y por tanto ninguno es menos que otro. De esta manera, su seguridad aumenta ya que siente que su trabajo es válido para sus compañeros. Fomenta la participación, la expresión de opiniones, la motivación y el sentimiento de pertenencia al grupo, lo que mejora la relación con sus compañeros y con los chicos de su entorno.

9. Respeto a los demás y aprender a compartir

Los docentes tratan en todo momento que los integrantes del grupo lleguen a resolver el problema, pero, como en todo grupo de niños, jóvenes o adultos, surgen conflictos derivados de las diferentes opiniones e incluso de un rol extremadamente autoritario. Cuando los educadores detectan este tipo de comportamientos, tratan de pautarles para que entiendan la importancia de compartir las opiniones y por supuesto, les hacen entender que ninguna opinión es puramente correcta, sino que el problema se soluciona uniendo las opiniones. En muchos casos, a lo largo de los cursos, hemos visto que la metodología de trabajo de la robótica permite que los niños pasen de una situación en la que les es difícil mediar, a una en la que determinados miembros asumen los roles de mediadores y no es necesaria la intervención del docente, por lo qu asumimos que han desarrollado esa habilidad.

10. Gestionar la frustración.

No siempre los ejercicios salen bien y muchos de los alumnos que temen el fracaso, y se lo toman como algo personal. La robótica les da la oportunidad muchas veces ha que consiguen solucionar el ejercicio. Los niños comienzan a darse cuenta de que llegar a un objetivo, no siempre se consigue a la primera, pero que gracias a la prueba y error pueden mejorar en los procesos para lograr y finalmente lo consiguen. De esta manera la frustración la canalizan tanto ellos mismo como gracias a sus propios compañeros, ya que consiguen apoyarse mutuamente y dejar lado.

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